Más de una vez hemos soñado con la posibilidad de plantar un jardincito en casa. Luego nos hemos dado la vuelta y observado nuestra diminuta terraza (si con suerte disponemos de esta). Pues bien, existen alternativas para aquellos que estamos hacinados en un piso pero anhelamos la idea de vernos rodeados de plantas y hortalizas.
Simplemente, si dispones de un pequeño espacio al aire libre y tienes ganas de probar la sensación de recoger aquello que uno mismo siembra, en el sentido más fiel de la expresión, practica la “urbanicultura”. No solo comerás mejor y más económico, sino que contribuirás a la sostenibilidad de tu entorno y aprenderás a apreciar mejor el esfuerzo de la autogestión. Lo ideal será que el cultivo lo llevemos a cabo en lugares donde se reciba el agua de lluvia, pues así evitaremos riegos y ahorraremos un poco de agua. Además, el tipo de macetas que emplearemos deberá ser adecuado para las especies plantadas.
Para ello existen muchas tipologías de contenedores con distintos materiales, formas y tamaños. Habitualmente muchos de ellos suponen un precio bastante elevado, lo cual suele echar para atrás al futuro jardinero, pero existen alternativas para ello pues siempre se podrá optar por los más económicos e incluso fabricarlos nosotros mismos. Podemos emplear un mantillo universal mezclándolo con un poco de tierra arcillosa y arena. Además el sustrato lo podemos reutilizar e ir fertilizándolo con compost (que podríamos fabricar en nuestro propio compostador si dispusiéramos de espacio para él), extractos de algas, etc.
Para el abonado y los tratamientos contra plagas no deberíamos emplear productos químicos, ya que generan residuos en el sustrato y en las plantas. Asimismo, si una planta presenta una plaga de muy difícil tratamiento o su estado es malo, es preferible eliminarla a darle un tratamiento químico costoso y contaminante. Si queremos combatir plagas, de pulgones, orugas, hongos, etc., de forma eficaz y sin dejar rastros químicos, siempre podremos optar por soluciones más naturales como el emplear jabón de sosa, extracto de neem, nicotina, Bacillus thuringiensis, quelatos de cobre, etc.
En esta infografía interactiva te proporcionamos cinco claves para empezar un huerto en casa. Su objetivo es acercar la agricultura urbana a las personas haciendo ver que no es una actividad difícil de realizar. Los temas principales son los métodos de cultivo, el calendario de siembra, el uso de plaguicidas y la utilización de fertilizantes ecológicos.
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Texto: Basado en la Guía FVS de los alimentos. Con la colaboración de Georgina Zamora Quílez, Raquel Coronado Lucio, Gonzalo Navarro Pérez (UAM) y Cecilia Barrera Gamarra.
Fotografía: Markus Spiske en Unsplash.